Con la fase 3 que el gobierno federal iniciaba el 21 de Abril del 2020 comenzaban a cerrar los negocios, mercados, etc. Era el inicio formal de la cuarentena en México.
En ese momento el poco comercio informal que aún resistía en las calles comenzó su lucha contra el virus y las reglamentaciones gubernamentales.
“Tenemos mes y medio que nos quedamos sin trabajo porque la tortillería donde trabajábamos cerró por la cuarentena. Allí fue que con mi marido comenzamos la idea de poner un puesto de frutas y verduras. Así que pedimos un préstamo para iniciar este trabajo por las calles.”
Maribel García Cuaczo
El ambulantaje fue uno de los sectores estigmatizados por las autoridades, asistir a estos mercados era sinónimo de contagio. Pero entonces comenzaron a caer la cifras de los desempleos
y los tianguis se volvían una oportunidad para el trabajo informal.
Al cierre de marzo, antes de la crisis en el mercado laboral causada por la pandemia, 1.7 millones de mexicanos se ganaban la vida con la venta de productos en las calles del país. Esa cifra es la más alta de la que se tenga registro desde 2012.
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A consecuencia de la contingencia tratamos de poner el puesto porque los clientes nos han pedido que vengamos ya que nos dicen: “sino vienen ¿dónde vamos a comprar o qué vamos a comer? ”
Pilar Xochicatl
“Sé que es peligroso venir a vender en este puesto de verdura y fruta pero tengo que sacar a mi familia adelante, ya que en este momento por la contingencia quedé desempleado.”
Javier Guzman.
